Una mesa en el centro del salón casi equidistante a las dos entradas fue el lugar donde nos reunimos. Acomodé mis libros a la vista cuando apareció benceno con quien parloteamos sobre temas puntuales que nos convocan en nuestras desvelos y bebidas calientes para contrarrestar ese nítido fresco invernal..La llegada de mycolorbuttons puso el apropiado color femenino al rectángulo de juego. Preanunciada a las 17 horas hizo su arribo jegolas con su delicada juventud y la autoridad de su sencillez.
Entre los cuatro presentes pusimos a disposición para la cacería 16 ó 17 libros. Como suele ocurrir, la gente que pasaba a nuestro lado miraba con asombro ese mediano despliegue de libros de todo tipo por autores o temas. Percibí una mujer en particular que pasó rodeada de su familia, miró ella con mucha atención con ganas en sus ojos de indagar. No lo hizo.
El gaseoso miembro hubo de retirarse en primer lugar. Los tres restantes quedamos trenzados en una ágil charla hasta que otros compromisos posteriores nos hicieron partir a las 18:40 horas de ese sábado 21 con rumbos diversos.
